Las mascarillas desechables funcionan actuando como una barrera física entre la boca, la nariz y el entorno circundante del usuario. Por lo general, están hechos de una tela no tejida que está diseñada Para filtrar partículas, gotas y otros contaminantes. La tela utilizada en estas máscaras tiene múltiples capas que trabajan juntas para atrapar y Reducir el paso de partículas o gotitas en el aire que pueden contener virus o bacterias. Cuando se usa correctamente, la máscara cubre la nariz y la boca, evitando la liberación de gotitas respiratorias del usuario y reduciendo el riesgo de inhalar partículas dañinas del medio ambiente.