La mayoría de los vendajes médicos no están destinados a su reutilización. Están diseñados para ser artículos de un solo uso debido a problemas de higiene y contaminación. Reutilizar los vendajes puede comprometer su esterilidad y aumentar el riesgo de infección. Además, las propiedades adhesivas, la elasticidad y la integridad estructural de los vendajes pueden disminuir con cada uso, reduciendo su efectividad. La reutilización de los vendajes también puede provocar un cuidado inadecuado de las heridas o un apoyo inadecuado, lo que dificulta el proceso de curación. Por lo tanto, fresco y generalmente se recomienda utilizar un vendaje estéril para cada aplicación para garantizar la limpieza, la seguridad y el rendimiento óptimo.